5/03/2008

Para el asombro de las greyes planas

Para el asombro de las greyes planas
suelo zurcir abstrusas cantilenas,
para la injuria del coplero Ganso
torno mis brumas cada vez más densas,
para el mohín de lo leyente docto
marco mis versos de bizarro rictus.
(Leyente docto abléptico pedante)
tizno mis versos de macabros untos...
León de Greiff.

Seguiría que "para mi no hago nada, nada, nada, si no soñar, solo vivir la vida"; pero he despertado de golpe y a golpes; a fuerza de no soportar estar tendido, todo hombre cuando cae tiende a levantarse - la física debe responder que todo cuerpo en movimiento tiende a permanecer en movimiento -. Se sabe entonces que caí pero este es tal vez mi manera de levantarme. Es hora de levantar al arte, a resucitar cada arte de la pereza que lo transita, de darle al arte su humanidad para que pueda ser mucho mas de lo que ahora es; y es cierto, por ahora el arte está muerto - señal milagrosa de que tenemos una oportunidad -.

Despertar a golpes, queridos lectores, es la señal terrible de que en un salón regional se expongan las expresiones plásticas de una región más cercana a lo artesanal y lo conceptual sin las capacidades de llevar las ideas a una obra que sepa conmover; es como si luego de investigar se rompiera el hilo entre el creador y su obra y quede solamente un investigador sin la capacidad plástica de representarse. Obras con explicaciones de más de una cuartilla, obras cuya única luz fue artificial y disminuida por la ensombrecida puesta en escena. Debe ser que el arte está cerrando las puertas con una violencia que nos merecemos a fuerza de no saber que somos, ni de poder siquiera correr el riesgo necesario para movernos; si el arte está inmóvil quienes lo hace están mucho más inmóviles; almas sin secretos, bocas acostumbradas a las palabras reiterativas y generales porque todo debe caber en las convenciones y "nadie va a sacarlo de sus casillas".

El Salón regional de artistas, como la facultad de artes de la Universidad de Nariño, está lleno de pretensiones que no pasan a la acción, es triste ver como materiales han quedado sin espíritu y que develen que el hombre a veces debe quedarse, para bien de los demás, en silencio. Por otra parte si bien es importante vincular a los niños y niñas al mundo del arte, debe comprenderse que hay otros escenarios para hacerlo; pero he ahí las pinturas - que me han parecido valiosas, mucho más que algunas de los artistas - de estos ingenuos lanzadas en un espacio que es nuestra representación plástica como región sur y serán las apuestas para ganar el salón Nacional de Artistas - no hay mucha esperanza -.

De todas maneras nos ha ganado la convención, el sistema contra el que protestan algunos ha podido significarlos y tragárselos de golpe, las expresiones artísticas son realmente pobres y siguen la costumbre del anarquista que quiere entrar en el círculo pero que no puedo romperlo.

No hay comentarios.: